Bienvenido Espíritu Santo
Autor: Benny Hinn
Hechos 10: Él Cambiará su Tradición
El vecindario donde me crié en Jaffa, Israel, se llamaba Jope en tiempos bíblicos, un antiguo nombre griego. Cuando niño escalé hasta el alcázar, un faro en el punto más alto del puerto. Cerca de allí está la casa de Simón, el curtidor de pieles, donde el apóstol Pedro tuvo una experiencia que cambió al mundo.
La visión de Pedro del cielo abierto mostraba a Dios bajando animales cuadrúpedos, reptiles y pájaros en una sábana gigante. Dios le dijo a Pedro que los matara y se los comiera. Pedro, un hombre atado por la tradición, dijo: "Señor, no; porque ninguna cosa común o inmunda he comido jamás" (Hechos 10:14).
El Señor respondió: "Lo que Dios limpió, no lo llames tú común"(v.15).
Mientras Pedro pensaba en la visión, el Espíritu Santo le dijo que bajara y se encontrara con tres hombres que lo buscaban. Además, Dios le dijo que no dudara "de ir con ellos, porque yo los he enviado" (v.20).
Pedro aborrecía a los gentiles. Estaba tan atado a su judaísmo que antes de ese momento no podía hablarles. Pero debido a la visión, abandonó su tradición y tuvo un gran ministerio en el mundo gentil.
Sólo el Espíritu Santo puede producir una transformación tan radical.